Todos somos Cuadrado Lomas

Ayer, viernes 6 de abril, el pintor Félix Cuadrado Lomas ha rechazado el Premio Castilla y León de las Artes 2018 por no tener el galardón remuneración económica alguna: «Pregunté si antes daban remuneración y me dijeron que sí, pero que desde hace cinco años no. Entonces pregunté causa y razón y me dijeron que por la crisis. Pero se están dando subvenciones a cualquiera para nada. ¿Dónde queda aquí la cultura? Si no tienen dinero que quiten el premio, que lo suspendan por falta de economía y quedan como Dios, pero que no organicen un premio sin remuneración, y más si antes sí la tenía», explicó a la Agencia Ical: www.elnortedecastilla.es/culturas/cuadrado-lomas-renuncia-20180406212515-nt_amp.html

No nos hacemos eco de la noticia de manera gratuita, sino por varios motivos: Cuadrado Lomas participó en la exposición colectiva "Panorama Pictórico", comisariada por José Antonio Arribas en la Iglesia de San Miguel de Arévalo en 2004, junto a otros que sí tuvieron la suerte de recibir el Premio y la remuneración (como Juan Manuel Díaz-Caneja o José Sánchez-Carralero). Arribas, por las gestiones y el comisariado de esta muestra, recibió como pago una placa por parte del Ayuntamiento de Arévalo. Esta, junto a otra recibida también en 2004 "por su colaboración como Presidente del Jurado en las siete primeras ediciones del certamen de teatro de aficionados Ciudad de Arévalo" forman parte de la obra "Arribas y el regalo del César", realizada en el contexto de "La Arqueología del Ser" y de la que ya hablamos en este blog hace unos meses. Entonces ya advertíamos lo mismo que ahora hace Cuadrado Lomas: los artistas no vivimos del aire, es degradante no obtener ningún ingreso por nuestro trabajo artístico. Dicho esto, debemos decir también que nos sentimos afortunados y agradecidos por poder desarrollar el proyecto
"La Arqueología del Ser" gracias a una beca de creación artística financiada por la Fundación Villalar-Castilla y León. 

No solo es cuestión pecuniaria, del mismo modo tenemos el orgullo de que de esta forma también se reconoce, de algún modo, la carrera de José Antonio Arribas. Un reconocimiento del que guardamos otra placa, a la que quitarle el polvo, otorgada por el citado Ayuntamiento, que nos pareció más que insuficiente. No es que quisiéramos dinero como Cuadrado Lomas, pero habiéndose inaugurado pocos meses después de su fallecimiento (y pocos meses antes de recibir esa placa homenaje) un monumento (monolito para unos, poliferro para otros) con el nombre de personajes ilustres relacionados con la localidad y que "salen en los libros", en palabras de la Concejala de Cultura, parece un chiste de mal gusto.

Con el arte vivimos como podemos, pero si de verdad queremos vivir bien deberíamos dedicarnos a hacer plaquitas lisonjeras.